Estamos siendo testigos de lo que sucede en cada cambio de administración municipal, se despide por causas políticas y para hacer lugar en el plantel, para nombrar a su gente.
Los políticos nuestros, siempre hacen lo mismo en Pilar, sin importar lo que digan siendo opositores, se contradicen sin vergüenza alguna.
Al ser oficialismo echan a los que haga falta, sin respetar carreras ni el drama familiar que eso implica.